CHARLES
M. PENEDEGATO
“SI
NO PUEDES SER JUSTO SE ARBITRARIO”
Tal vez por lo anterior no
duró mucho juzgando a personas de Tierra Nueva y se inclinó por los juicios a
los muertos; además no podría nunca contar sus sueños a las personas, pues sería
acusado de padecer principio de idolatría y como se sabe en Tierra Nueva esto
es un gran delito. Por eso trataba siempre de andar ebrio y a escondidas tomaba
una pequeña dosis de pentaciclina que le garantizaba estar cuerdo entre los
abogados, fiscales y demás cargos burocráticos que se designaban a toda hora
por el Gran Parlamento. El solo necesitaba su mallete de madera de eucalipsis
tallado con delgados anillos de plata en sus partes planas, todo esto con el
fin de generar un sonido más fuerte que los otros.
El Honorable C pasaba sus
días entre martillazos, putas y piñas coladas. La palabra clave de la historia
de la humanidad es “Venganza” y los juzgados MARTILLOPURPURA estaban llenos de
venganza. En otro tiempo el Honorable C disfrutaba siendo juez, aunque le
molestaba profundamente que la gente se pusiera de pie cuando él entraba y un
día fue desnudo al juzgado, nadie lo notó pues tenía la toga puesta. Fue una
apuesta que hizo con Dog Roxin con quien se conocía desde la Universidad
BALANZAOXIDADA y con quien habría hecho un par de negocios.
***
LOS
HUEVOS NUCLEARES
Piensas en la justicia y sus
mitos intrínsecamente cosmogónicos. En Tierra Nueva solo hay una verdad:
"no te juzga el que te creó sino el que te puede destruir". Por eso
las armas nucleares que sobrevivieron de Tierra Vieja eran guardadas en el
centro de la ciudad debajo de los juzgados MARTILLOPURPURA en la gran verga
central donde se concentraba el poder.
***
La nostalgia de la culpa, la actuación que rebasa todo sistema moral, la no compatibilidad entre los actos naturalmente humanos y lo políticamente correcto; el Honorable C pensaba en lo bello que fueron las cruzadas y en lo triste que es la paz, “la paz es para flojos”, pensaba, “la gente merecedora de manos muere y mata por sus ideales, las manos están hechas para encajar en el cuello del enemigo, la gente incendiaria es portadora del fuego de Prometeo”. Pero en todo caso el actuar sin límite alguno haría que su oficio perdiera todo objeto y toda razón de ser, por eso le gustaba ser juez, armaba en cada juicio un gran puzzle que se resolvía a favor de la idea: "La violencia crea". Sin violencia no hay paz, pensaba entre eco y eco del martillazo.
***
El
Honorable C fue un puto farsante que encontraba en cada verdad una mejor
mentira.
"nada
es verdad todo está permitido".
El Honorable C y Dog Roxin
crearon juntos una academia clandestina de falsos testigos, en ella entrenaban
a cualquier hijueputa que pudiera mentir: juntos redactaban un completo guión
sobre los hechos falsos, no les dejaban conocer sobre los verdaderos para
garantizar una mentira libre de contaminación. Este contenía todos los detalles
que se requirieran, vestimenta, clima, elementos, colores, rasgos de las
personas, acentos de voz, estados de ánimo, música que sonaba de fondo,
condiciones de luz, gente alrededor, la historia y ocupación de la gente
alrededor, animales, energías extrañas, en fin, la mayor información posible. Toda
estaba tratada de la manera más cuidadosa. Este guión era leído 3 veces a los
testigos que permanecían con los ojos cerrados, se leía cada vez de forma no
lineal y fragmentada, por una persona diferente para que a la hora del
interrogatorio la reconstrucción desde la memoria se diera de forma natural,
orgánica y se ajustara al sistema
sensorial de cada testigo, incluso se incluían estímulos externos y pequeñas
variaciones que no fueran sustanciales: si era necesario también olores,
sonidos, texturas, heridas, etc.
En alguna ocasión intentaron
recrear los hechos como una película de las que Dog Roxin fungía como si fuera
un puto cineasta del neorrealismo italiano. Amaba dirigir y siempre se perdía
en los detalles de arte y fotografía, en fin, era un esfuerzo caro e innecesario. Se la mostraban luego a los
falsos testigos, pero no dio muchos resultados, además no era fácil desaparecer
el material incriminatorio, los props y los archivos.
Si era necesario entrenaban
a un par de testigos de más, que luego eran incorporados por las partes de
forma natural, haciéndolo aún más creíble. Esto les resultaba por lo demás algo
genial de hacer, era seguro, pues nunca interactuaban con los falsos testigos
Todo se fue a la mierda
cuando juntos se enamoraron de una misma falsa testigo que fue asesinada a
causa del fallo que emitió el Honorable C en donde un tranquilo bibliotecario,
el Sr Rinotel J. Simmons fue inculpado por estupro para que su mujer se quedara
con la pensión esto causó una reacción retaliativa que dejo por muerta a Marie
Colibrin. Puede que desde ese día empezaran las extrañas visiones con sus
condenados y el gusto exagerado por las piñas coladas y la pentaciclina.
Escena
1
Charles
M Penedegato fungiendo como grafólogo
- ¿Cómo mierda conseguiste
eso Señor C?
- Todo se puede preciosa…
- ¿Ustedes Siempre se quedan
con las pruebas?
- ¡Nunca, a veces nos
quedamos con algo de culpa, pero nunca con el material probatorio!
- ¿Culpa?
- ¿Qué?
- ¿Cómo tienes eso?
- Verás, una vez absolví al
fiscal que me lo dio
- ¿De qué?
- Cohecho creo
- ¿Crees?
- Estás preguntando mucho
- ¿Yo?
El honorable C le lanza una
mirada sarcástica a la puta que lo acompaña y vuelve a la carta que dejó Dog
Roxin en el baño donde murió.
- Bueno… Mejor me quedo
callada…
- Verás preciosa, Dog Roxin
estaba mal de la cabeza pero no parecía un suicida.
- Pero, pero… ¿Crees que…?
- No sé qué creer, fabricar
verdades es tan fácil, el sistema judicial y el establecimiento está tan jodido
que pierdes la inocencia y te vuelves paranoico, es más, es posible que nos
estén viendo tras ese espejo del techo.
- ¿Tú crees?
- Deja de preguntar y vamos
a darles un poco de porno.
***
La cuestión del suicidio es
siempre una pregunta sugestiva, a nadie le jode la cabeza una muerte hasta que
se trata de un suicidio, un pregunta retórica,
el "¿Por qué?" de los vivos mientras piensan en la muerte de
un suicida. No hay filosofía cuando se puede ver la piedra que aplastó la
cabeza, No hay filosofía si se le encuentra un par de balas en el estómago o
veneno en las pupilas. No hay filosofía.
Escena
2
El
señor C, Dog Roxin y un Dealer idolatra
Muchos jueces y abogados
llegaban a Providencia Bar un sitio lleno de pinturas renacentistas cubiertas
de grafitis y con pesadas luces de neón que titilaban durante un hilarante show
erótico ambientado con un loop de música electrónica. Una mujer flotaba horizontal
y se elevaba lentamente luego giraba y giraba, las luces prendían y apagaban
con gran velocidad, en esto consistía su mejor show, luego el Honorable C
prendía un vaporizador y chupaban un humo púrpura que salía por un pezón de
vidrio.
Esa noche no fue así, el
Honorable C tenía que ir a comprar humo púrpura (droga alucinógena sintética a
base de cabello humano).
- ¡Eh! Quiero humo púrpura.
- ¿Me estas acusando de
Dealer?
- Déjate de putadas dame
humo…
- ¿Traes micrófonos?
- A la mierda voy hasta
donde Pig Boom
- ¡Eh! Espera...
- ¿Tienes humo o no? ¡Puto
idolatra!
- Take easy
- ¡Come mierda maldito
Funnyer!
___________________________
- Eres un amor Pig Boom
- Ya tú sabes…
- El maldito de Funnyer me
estaba jodiendo
- Acá hay buen humo y
suficiente como para enviar una señal a los putos aliens.
- jajajajjajaja
- jajajajajajaj a Dog y su
Pajarita les encantaba nuestro humo.
- ¿Pajarita?
- Pajarita...
- ¿Quién?
- Pajarita.
- ...
Más tarde en la fiesta se
reunían a jugar al tambor chino un juego que consistía en tomar unas tarjetas
con tipos penales e idear la perpetración perfecta tendiendo siempre a no dejar
culpables, mientras los otros trataban de desestimarla y encontrar los puntos
débiles en los supuestos y las teorías, podían pasar toda la noche en esto, era
divertido.
En esas uno de los
jugadores, Karl Dormilon, propuso la inducción al suicido para la comisión de
un homicidio.
- No es posible, la
inducción al suicidio es de por sí un delito.
- Pero no de homicidio,
además podrías instrumentalizar a alguna perra que le joda la cabeza a tu
víctima, no hay delito por ser un amante suicida.
- Y tu mujer sería un cabo
suelto, terminaría hablando: Síndrome de Raskolnikov.
- Los idolatras se auto-indultan
luego de desayunar, no hay culpa que pueda contra la doble moral de un
idolatra, necesitamos una linda chica del gueto y unas solidas líneas de guión
del método Roxin para leérselas. Hablaría sobre un amor extraño, disfunción
eréctil, abuso de la pentaciclina y un poco de humo púrpura y ahí está,
cualquiera está dispuesto a tragarse una bala.
Cuando parecía que el
Honorable C y Karl Dormilón se enfrascarían en una perorata, el señor C decidió
ordenar una ronda de piñas coladas, dio tres caladas al pezón de vidrio y se marchó.
Escena
3
El
Honorable C y un monologo frente el espejo, una voz en OFF que no es de él.
Charles M Penedegato se
limpiaba los gusanos blancos que le salían de la córnea mientras se veía al
espejo y pensaba:
A nadie le interesan mis
reflexiones, escupo en la acera esperando a que el mundo explote, hay una bella
explosión pero nadie está ahí para verla... Ya no me interesan las grandes
preguntas sobre el universo, la maldición de la ciencia... ¿Quién mierda es la
Pajarita de la que habló Pig Boom? Recuerdo a Dog Roxin como el tipo más solo
de este planeta, solo nos teníamos a nosotros a diario martillando cabezas,
absolviendo, cobrando, la zozobra y el hielo en las piñas coladas ¿quién podría
ser Pajarita?
Piensa en blanco, piensa en
blanco ¿acaso debería ir con Pig Boom a preguntarle? No, terminaría por
venderme más de su mierda púrpura ¿sería Pajarita una idolatra? Piensa en
blanco, en blanco.
¿Honorable C desde cuándo
sabes que la condena es rodar abajo con la piedra? La justicia es una forma de
sisifear, nunca se acabarán los crímenes. ¿Acaso se podía asesinar a alguien y camuflarlo con
un suicidio? ¿Dónde estará Dog Roxin pagando sus penas? ¿Tendría que juzgarlo
de nuevo por algún crimen? ¿Tiene sentido juzgar muertos como lo había dudado
Dog Roxin?
Mantén el dedo fuera del
gatillo.
El Honorable C mientras
bajaba tres pastillitas de pentaciclina, se daba palmaditas en la garganta y
sorbía un poco de agua, y los gusanos desaparecían de sus ojos.
Continuara…
Nota:
Todo en esta mierda de fanzine es ficción, los abogados,
jueces y funcionarios del sistema judicial son buenos tipos, sobrios, justos,
honestos y transparentes, lo unico real es la explosion nuclear de 2039 que dio
inicio a Tierra nueva luego de que Vladimir Bakunin Primer Ministro Ruso oprimiera
el boton rojo despues de derramar mate sobre sus testiculos, se especuló mucho
sobre la posibilidad de que decidiera acabar con el mundo tras tener una vision
donde el ultimo ser fertil sobre la tierra se masturbaba escuchando Oh Fortuna.
TEXTO E ILUSTRACIONES: Santiago Rodriguez.
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